Cortos
¿Por qué no?
- Cine y vídeo
- Seminarios y conferencias

Celebrada el 5 marzo, 2008 - 30 marzo, 2008
El cortometraje, medio experimental por excelencia, tiene una larga tradición dentro de la historia del cine y el arte contemporáneo. Posee un lenguaje propio y es el formato que ofrece mayor libertad y posibilidades de experimentación dentro del medio audiovisual. Numerosos festivales dedicados exclusivamente al cortometraje atestiguan su vigencia e identidad diferenciada.
El Festival de Cortometrajes de Oberhausen constituye, desde los cincuenta, una plataforma para los cortometrajes que se proponen romper las reglas establecidas del cine mientras que en España, donde el fenómeno de atención al cortometraje es más reciente, citas como Documenta Madrid, Zinebi, Cortogenia o Almería en Corto, entre otros festivales y muestras cinematográficas, han ido proliferado en los últimos años.
La programación, dividida en tres categorías (ficción, documental y animación), presenta algunos de los cortometrajes más premiados de los últimos años, como Alumbramiento (2007), de Eduardo Chapero Jackson (Madrid, 1971) y Traumatología (2007), de Daniel Sánchez Arévalo (Madrid, 1970), ambos premiados en el Festival de Cine de Málaga, entre otros certámenes. El programa incluye asimismo documentales como Eût-elle été criminelle... (2006), de Jean-Gabriel Périot (Bellac, 1974) y El cerco (2005), de Ricardo Íscar y Nacho Martín. Del siempre deslumbrante ámbito de la animación llegan, por otra parte, Señor Trapo (2003), de Raúl Díez, Fast Film (2003) de Virgil Widrich, y El enigma del chico croqueta (2005), de Pablo Llorens.
El ciclo incluye una mesa redonda moderada por Óscar de Julián, guionista y director del Festival Internacional de Cortometrajes Almería en Corto, sobre el estado actual y el futuro del cortometraje en un momento en que las posibilidades de la imagen son mayores y los medios para hacer un corto están al alcance de todos. La analista de proyectos Guadalupe Arensburg, el veterano cortometrajista Jorge Dorado y Antonio Delgado Liz, director del Festival Internacional de Documentales Documenta Madrid analizan el universo actual del cortometraje en toda su extensión.
Comisariado
Mercedes García, Óscar de Julián y Sonia Fernández (Great Ways, Madrid)
Material adicional

Cortos. ¿Por qué no?
Más actividades
Zum: Naufragio con espectadores
14, 16, 17, 17, 18, 21, 23, 24, 24, 25, 28, 30, 31, 31 OCT, 21, 21, 22, 25, 27, 28, 28, 29 NOV, 2, 4, 5, 5 DIC 2024
Zum. Naufragio con espectadores es un recorrido —diseñado por Miguel Vega Manrique en colaboración con el Área de Educación del Museo Reina Sofía y dirigido a alumnos del curso 4º de la ESO y Bachillerato— que busca cuestionar el lugar desde el cual, como espectadores, nos aproximamos al mundo que nos rodea a través de conceptos como la desorientación, la curiosidad, lo imprevisible, el desconcierto y la experimentación, presos de un estado de embriaguez más o menos reversible.
El recorrido se desarrolla en el espacio de la Colección Un barco ebrio: eclecticismo, institucionalidad y desobediencia en los ochenta, situado en la Planta 0 del Edificio Nouvel. En él se nos invita a sumergirnos en el Museo como posibles náufragos de una historia reciente cuyos pilares residen sobre el consenso político de la socialdemocracia, el régimen económico de capitalismo de consumo y las consiguientes crisis globales que asolan el planeta.
El barco ebrio, en alusión a Le bateau ivre, poema de Arthur Rimbaud que aludiría a la deriva de un arte que navega sin un rumbo fijo, fue el título descartado por el comisario Rudi Fuchs para la documenta 7 de Kassel (1982), en la que se comienza a proponer una mediación cultural que transite por una concepción cambiante e inestable del cuerpo en diálogo con la enfermedad, la tecnología, la ciencia, lo escultórico, el diseño y la teátrica de las identidades y del conocimiento que nos constituyen.
En este contexto, las metáforas de la embriaguez, la navegación y el naufragio como riesgo implícito nos sirven para reflexionar sobre los límites de un espacio y de una visualidad determinados, con una idea instituida de frontera y de cuerpo. ¿Es el naufragio el precio a pagar por una estabilidad, una modernidad, un orden institucional aparentemente inamovibles? ¿Podemos vivir sin las pasiones, vientos, tormentas o calamidades que de vez en cuando arrastran todo consigo? ¿Qué sensaciones, afectos, peligros o emociones despiertan en el espectador la puesta en escena y el espectáculo en los que participa?
Chema García Ibarra. Espíritu sagrado
8 NOV 2024
Aconsejaba Kipling a la hora de construir un relato no adoptar la figura de un demiurgo omnisciente, sino ignorar parte de la historia durante su narración. Y es ahí donde reside la imprevisibilidad narrativa y la potencia dramática de Espíritu sagrado, primer largometraje de un director, Chema García Ibarra, que se había hecho notar allá por 2009 con su corto El ataque de los robots de Nebulosa-5. Desde entonces su obra ha seguido el sendero de una particular ciencia ficción costumbrista ilicitana y de una aproximación a la fantasía desde lo cotidiano, y viceversa, que le permite seguir ahondando en los abismos que se abren en nuestro entorno más próximo. El hecho de utilizar intérpretes no profesionales contribuye a la misma sensación de extrañamiento que provoca el horror situado fuera de campo: el mal se cierne sobre el mundo, pero de nada vale “vigilar los cielos” porque este no va a llegar del espacio exterior, sino de nuestro entorno más cercano.