Espantando el mal
Grupo de estudio en torno a la farmacologización y los malestares contemporáneos
- Investigación

Celebrada el mes de febrero a marzo, 2020
El grupo de estudio Espantando el mal busca abordar la farmacologización de la vida y los malestares contemporáneos que produce la realidad neoliberal, así como poner en común formas de resistencias colectivas y cotidianas.
La farmacologización de los cuerpos se produce al pasar de un criterio médico-científico a una cada vez más sólida alianza entre la industria farmacéutica, el poder económico y la lógica de mercado. Este desplazamiento es parte de un cambio de paradigma a partir del cual cuestiones fundamentales de la vida dejan de ser derechos para transformarse en objetos de consumo como, en este caso, la salud. Las nuevas afecciones se diagnostican sin considerar aquellos aspectos que pueden tanto provocar su existencia como intervenir en su mejoría, dejando de lado las razones políticas, sociales y ambientales, y ofreciendo solo soluciones desde el mercado farmacéutico. Con la salud privatizada e individualizada –donde cada persona es responsable de su malestar y su mejora–, ¿es posible pensar formas alternativas y/u opuestas a la gestión neoliberal del cuerpo? ¿Hay posibilidad de hacernos cargo de la salud más allá del ámbito médico-científico-farmacéutico? ¿Dónde queda el papel de los cuidados y del entorno? ¿Existen otros marcos de producción de conocimiento y de formas de concebir la salud como un bien común
Este grupo propone una aproximación a ciertos saberes alternativos a los de la salud hegemónica y a maneras de vivir que reivindican la agencia política en el contexto actual, generando opciones viables para un buen vivir. Las propuestas del buen vivir venidas del Sur global plantean una ética de la vida digna, concebida en plenitud, equilibrio y armonía más allá de lo humano, en una correlación recíproca con lo que nos rodea.
Esta noción puede rastrearse en la mayoría de los pueblos de territorios americanos —tsotsil-tseltal / ekil kuxlejal en maya, sumak kawsay en quechua, suma qamaña en aymara, teko porã en guaraní y küme mogen en mapudungun— y, pese a haber sido sometida por la colonialidad durante más de 500 años, en las últimas décadas se han levantado movimientos en defensa de una vida digna como, por ejemplo, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN, México), Movimiento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir, Feminismo Comunitario Antipatriarcal de Bolivia, Organizaciones de lucha Mapuche, Mujeres Kurdas del Rojava del norte de Siria, entre otros. Estas prácticas contrarrestan el discurso del llamado “realismo capitalista” (Mark Fisher, 2009), que ha servido como base subjetiva e inmovilizadora del actual modelo económico, social, cultural y político, haciéndonos pensar que no hay una alternativa al capitalismo.
Partiendo de estas cuestiones, el grupo se organiza en torno a tres movimientos: uno dirigido “hacia dentro”, que identifica, diagnostica y pone en común el malestar de cada un+; otro orientado “hacia fuera”, que busca y recopila otras experiencias de vida y lucha con el objetivo de favorecer conocimientos sobre el buen vivir; y el último que imagina, propone y ensaya maneras de hacer frente al sistema neoliberal que privilegia la mirada individual a la hora de pensar la vida.
Espantando el mal es una propuesta de la plataforma de investigación Equipo re, que se sitúa en el cruce entre las políticas del cuerpo y las del archivo, y que, en los últimos años, ha desarrollado el proyecto Anarchivo sida. Este grupo de estudio da continuidad a ejercicios anteriores de reflexión y debate sobre la gestión de la vida, en los cuales se han explorado modos de hacer, compartir, producir e intercambiar saberes a través de prácticas no hegemónicas, transversales y afectivas.
Coordina
Equipo re - Anarchivo sida (Nancy Garín y Linda Valdés)
En el marco de
Línea-fuerza
Malestares contemporáneos
Organiza
Museo Reina Sofía
Programa educativo desarrollado con el patrocinio de

Sesiones: 14, 15, 28 y 29 de febrero; 13,14, 27 y 28 de marzo de 2020
Horario: viernes de 18:00 a 20:00 h y sábados de 10:00 a 13:00 h
Material adicional

Espantando el mal. Publicación del grupo de estudio
Más actividades
Zum: Naufragio con espectadores
14, 16, 17, 17, 18, 21, 23, 24, 24, 25, 28, 30, 31, 31 OCT, 21, 21, 22, 25, 27, 28, 28, 29 NOV, 2, 4, 5, 5 DIC 2024
Zum. Naufragio con espectadores es un recorrido —diseñado por Miguel Vega Manrique en colaboración con el Área de Educación del Museo Reina Sofía y dirigido a alumnos del curso 4º de la ESO y Bachillerato— que busca cuestionar el lugar desde el cual, como espectadores, nos aproximamos al mundo que nos rodea a través de conceptos como la desorientación, la curiosidad, lo imprevisible, el desconcierto y la experimentación, presos de un estado de embriaguez más o menos reversible.
El recorrido se desarrolla en el espacio de la Colección Un barco ebrio: eclecticismo, institucionalidad y desobediencia en los ochenta, situado en la Planta 0 del Edificio Nouvel. En él se nos invita a sumergirnos en el Museo como posibles náufragos de una historia reciente cuyos pilares residen sobre el consenso político de la socialdemocracia, el régimen económico de capitalismo de consumo y las consiguientes crisis globales que asolan el planeta.
El barco ebrio, en alusión a Le bateau ivre, poema de Arthur Rimbaud que aludiría a la deriva de un arte que navega sin un rumbo fijo, fue el título descartado por el comisario Rudi Fuchs para la documenta 7 de Kassel (1982), en la que se comienza a proponer una mediación cultural que transite por una concepción cambiante e inestable del cuerpo en diálogo con la enfermedad, la tecnología, la ciencia, lo escultórico, el diseño y la teátrica de las identidades y del conocimiento que nos constituyen.
En este contexto, las metáforas de la embriaguez, la navegación y el naufragio como riesgo implícito nos sirven para reflexionar sobre los límites de un espacio y de una visualidad determinados, con una idea instituida de frontera y de cuerpo. ¿Es el naufragio el precio a pagar por una estabilidad, una modernidad, un orden institucional aparentemente inamovibles? ¿Podemos vivir sin las pasiones, vientos, tormentas o calamidades que de vez en cuando arrastran todo consigo? ¿Qué sensaciones, afectos, peligros o emociones despiertan en el espectador la puesta en escena y el espectáculo en los que participa?
Chema García Ibarra. Espíritu sagrado
8 NOV 2024
Aconsejaba Kipling a la hora de construir un relato no adoptar la figura de un demiurgo omnisciente, sino ignorar parte de la historia durante su narración. Y es ahí donde reside la imprevisibilidad narrativa y la potencia dramática de Espíritu sagrado, primer largometraje de un director, Chema García Ibarra, que se había hecho notar allá por 2009 con su corto El ataque de los robots de Nebulosa-5. Desde entonces su obra ha seguido el sendero de una particular ciencia ficción costumbrista ilicitana y de una aproximación a la fantasía desde lo cotidiano, y viceversa, que le permite seguir ahondando en los abismos que se abren en nuestro entorno más próximo. El hecho de utilizar intérpretes no profesionales contribuye a la misma sensación de extrañamiento que provoca el horror situado fuera de campo: el mal se cierne sobre el mundo, pero de nada vale “vigilar los cielos” porque este no va a llegar del espacio exterior, sino de nuestro entorno más cercano.