Mario de Vega
Díptico
“Estragón: siempre encontramos algo, ¿eh, Didi, para darnos la impresión de que existimos?
Vladimir: Sí, sí, somos magos ".
Samuel Beckett, Esperando a Godot
Díptico es un conjunto de dos obras electroacústicas. Su estructura está basada en incidentes sonoros registrados en Katmandú (Nepal), Varanasi (India), Nagasaki (Japón) y Shenzhen (China). Grabaciones realizadas con un dispositivo portátil de baja calidad situadas como eje semántico para estructurar un enunciado sónico dividido en dos partes. La pieza fue arreglada en Berlín, donde han sido producidas señales electrónicas abruptas a partir de obstrucciones eléctricas y de programación algorítmica, mezcladas con actividad acústica dispersa resultado de reacciones químicas y fluctuaciones de voltaje, intermitencias y bifurcaciones.
Concebida como una narración auditiva para inducir y reflexionar sobre las cualidades afectivas de la sonoridad, Díptico pretende ofrecer al oyente una experiencia fenomenológica basada en el desplazamiento y la empatía como conceptos principales de estudio, utilizando el sonido como un medio capaz de regular experiencias perceptivas.
Una historia narrada a partir de cuatro puntos, trazados sin predeterminación, donde el sonido toma un gesto predominante para la creación de supuestos, insinuando apariciones posibles. Así, se crean una serie de eventos no ocurridos y, sin embargo, reales.
La sonoridad, la presencia y la invisibilidad son puntos de partida en el trabajo artístico y de investigación de Mario de Vega (Ciudad de México, 1979). Una práctica que aborda cuestiones y problemas que podrían denominarse "desestabilización productiva". Su trabajo explora la tensión entre documentación y performatividad, abordando visualmente la actividad auditiva: documentación fotográfica, video, objetos, restos de acciones, eventos y situaciones que producen relaciones ambiguas entre objetos y espacios. También utiliza el contexto para indagar en el valor de la fragilidad y la indeterminación, asumiendo la imposibilidad de control, dejando espacio para la reflexión sobre lo que es impredecible.
Mario de Vega ha sido artista y profesor invitado en la Universität der Künste Berlin, Rijksakademie (Amsterdam), Internationales Musikinstitut Darmstadt, Technische Universität Berlin, École nationale supérieure des Beaux-arts (París), Centro de Diseño, Cine y Televisión (Ciudad de México), KW Institute for Contemporary Art (Berlín), Laboratorio Arte Alameda (Ciudad de México), Kyushu University, Tama Art University (Tokio), Universität für angewandte Kunst Wien y Harvestworks Digital Media Arts Center (Nueva York), entre otros.
Su trabajo ha sido exhibido en México, América del Norte, Chile, Sudáfrica, India, Corea del Sur, China, Rusia, Japón y Europa. Vive y trabaja en Berlín y en la Ciudad de México.
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Los sonidos que aquí se pueden escuchar no solo aspiran a ser una versión acústica de la experiencia en el Museo, sino que pretenden convertirse en nuevos continentes, capaces de amplificar las nociones de Colección, Exposición y Debate.